* Aniversario de Max FM
En Puebla lo que juega es la música grupera y dolorosa
Arturo Cruz Bárcenas, enviado, San Martín Texmelucan, Pue. * Por estas tierras de los ángeles lo que juega es la música grupera. Y la estación de radio más popular que transmite este género es Stéreo Max FM, en el 81.1, la cual ya celebró el pasado lunes su cuarto aniversario con un festival al que asistieron unas 40 mil personas (55 mil o más, según los organizadores).
Todo comenzó hacia las tres de la tarde. Ya había unas 20 mil personas, de todas las edades, familias enteras, algunas con bebés en los brazos; por allá unos minusválidos en sus sillas de ruedas. Cuál Zócalo, cuál Parque Fundidora, špuro San Martín Texmelucan! Tacos de carnitas, aguas de fruta de dudosa reputación, tamarindosas todas; tortas mojadas, pambazeadas; tacos de guisados mil, como de mollejas y tripas de pato; algodones de azúcar; regalos para la novia, como cojines en forma de corazón, šcuál cursilería! Ese es amor sincero. Yo pago la entrada, me pongo mi sombrero o mi cachucha, mis bototas y a darle, que es mole de olla.
Para ir entrando en calor nos reventamos unas de Yaguarú, luego otras andinas de Los Askis, con su Cumbia azteca, y brincamos como concheros, o como los fans de El Tri, que danzan igual. Ya picados cantamos las dolorosas de Cuisillo. Vamos a comer algo para aguantar hasta las doce de la noche. Ya se oye el grupo de Jorge Domínguez y sus Super Class; apúrate, gordita, que se nos van a pelar y luego cuándo los volvemos a ver. Por lo menos alcanzamos a los Super Lamas.
A los que sí no me pierdo por nada del mundo es a Los Tiranos del Norte, el sexteto del bolero oriundo de Mexicali, Baja California, formado en 1992. Fue en este año cuando produjeron su primer disco, Mátame a besos, pero no fue sino hasta 1993 cuando pegaron con tubo, con el disco Hermosa tirana, donde un tema los llevó a las nubes de la música norteña: Hasta la miel amarga, que los ubicó en el Billboard. Los Tiranos, no obstante su juventud, han sido influencia en grupos que hoy están en la cima, como Intocable.
Y suben Los Tiranos a uno de los tres escenarios dispuestos para el festival. Una ola de gente va de un lado a otro; se levanta una polvareda. Unos no aguantan la presión de ese maremoto humano. Piden auxilio al personal de seguridad, a paramédicos; los perros guardianes ladran, aun con su bozal; una joven se desmaya por los apretujones; madres desesperadas alzan a sus niños, suplican ayuda, que las saquen de ahí. Algunas brincan la cerca de alambre, casi asfixiadas. Eso es común en los actos masivos, lamentablemente. Y los primeros en llegar son los primeros en salir chispados.
El personal de seguridad por fin logra calmar al público, mientras Los Tiranos del Norte entonan Extravío y mar y cielo. Romperán el momento romántico con la rola chusca El toalla mojada. Luis Memo Bernal expresó que Los Tiranos tienen un estilo romántico, fresco, que llega. "Siempre tratamos de cantarle a la mujer; aunque también al desamor. Sí, hay gente que llora durante nuestras presentaciones y no sabemos cómo tratarla. Nos da sentimiento y gusto; ellos sienten las canciones. Lo mejor es que canten contigo".